Las hermanas “Junioras” se encuentran para conectarse al corazón de Jesús

En el verano siempre es un momento de fraternidad y encuentro, las religiosas de Santa Marta viven muchos espacios formativos y comunitarios para cultivar la vocación y responder al llamado de Dios.

La casa de la Delegación en Santiago es el lugar de encuentro por excelencia, ahí se vive todo el proceso formativo y también comunitario de la Familia Religiosa.

Durante estos días, en la Casa de las Violetas, en Santiago, entre el 12 al 19 de febrero se reúnen en un periodo de formación especial las “Junioras” de la Delegación, ella son:  Sor Ligia Can, Sor Jessica Olea y Sor Lucía Casanova.

El tema de este encuentro es “Conectadas con el corazón de Jesús”, además profundizarán temas referidos a la vida religiosa y al carisma de la Congregación.

Este encuentro es guiado, en los distintos momentos, por las Religiosas que están encargadas de la formación, Madre Mariela Osa y Sor Luisa Pereira, acompañadas por consagrados que ayudan en la reflexión como lo son el Sacerdote Diocesano, P. Francisco Herrera y la Hna. Salomé Labra, Sierva del Espíritu Santo .

Junto a los espacios formativos, las “junioras” vivirán momentos intensos de oración junto a Jesús Sacramentado.


¿Quienes son las “Junioras”?

Las “Junioras” son religiosas de Santa Marta que se encuentran en proceso de formación, tienen los votos de castidad, pobreza y obediencia de manera temporal, es decir, los van renovando en periodos de 1 hasta 3 años.

Esta etapa formativa se vive entre la primera profesión religiosa (después del noviciado) hasta la realización de la profesión perpetua, donde se entrega el sí generoso a Dios por toda la vida.  

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