A fines de mayo se vivió un encuentro significativo para la educación inicial: el Encuentro Nacional de Educadoras de Párvulos de los Colegios Santa Marta de Chile, una instancia que reunió a educadoras de distintas ciudades del país, en un espacio de reflexión pedagógica y espiritual, marcado por los valores de fe, acogida y servicio.
El encuentro fue coordinado por Sor Marcela Valenzuela, Sor Iara de Souza y Sor Jeanette González, quienes integran la comisión de educación de la Delegación.
Este encuentro se realizó de manera telemática el 22 de mayo. Y desde la ciudad de Valdivia, participaron las educadoras Paola Sanhueza y Loreto Sánchez, quienes compartieron sus impresiones sobre la jornada y su experiencia con la implementación de la propuesta de la Nueva Educación en su comunidad escolar, potenciando el autoconocimiento, plan personal, acciones que desarrollen autonomía.
“Consideramos que la instancia fue positiva y enriquecedora, ya que nos permitió socializar con las colegas que inician su proceso con Nueva Educación con el mismo carisma que nos caracteriza. Intentamos abordar las preocupaciones e interrogantes que este desafío conlleva”, señalaron.
Reconociendo que esta transformación educativa puede generar ansiedad e inseguridad al inicio, destacaron que el proceso de apropiación se vuelve más amigable y menos complejo con el tiempo. También valoraron cómo este cambio fortalece las capacidades profesionales y el trabajo en equipo, esperando haber transmitido esa seguridad y entusiasmo a las demás participantes.
Educación emocional y autoconocimiento: una transformación profunda en Valdivia
Uno de los puntos centrales del testimonio de las educadoras fue el impacto del enfoque de la Nueva Educación en el desarrollo emocional de los párvulos:
“Ha sido muy favorable, ya que ha permitido que los niños y niñas desarrollen la empatía, validen sus emociones y reconozcan cómo se sienten sus compañeros ante diversas situaciones escolares y familiares”, destacaron.
Además, enfatizaron el trabajo formativo realizado con las familias, a través de talleres y acompañamiento profesional, fortaleciendo el vínculo hogar-colegio en un proyecto educativo integral.
En cuanto a los avances del trabajo de autoconocimiento con la llamada “generación tractor”, las educadoras señalaron logros concretos:
- Los párvulos se reconocen como personas únicas y especiales.
- Identifican sus fortalezas y debilidades.
- Verbalizan y validan sus emociones.
- Demuestran empatía y acogida hacia sus compañeros.
- Expresan sus sentimientos de manera adecuada.
Este primer encuentro no solo fortaleció la red de educadoras de los colegios Santa Marta, sino que también reafirmó el compromiso con una educación transformadora, donde la espiritualidad y el desarrollo humano van de la mano.