La Delegación de América Latina de las Religiosas de Santa Marta vive con alegría y gratitud la celebración de los 25 años de la beatificación de nuestro amado Padre Fundador, el Beato Tomás Reggio.
En esta ocasión especial, Madre Ana María, Delegada para América Latina, compartió un mensaje para quienes viven el carisma de Santa Marta.:
“Mientras la Iglesia está celebrando el jubileo, nosotros también celebramos el jubileo de la beatificación de nuestro amado Padre Fundador, el Beato Tomás Reggio. Hoy, 3 de septiembre, recordamos su figura como un hombre que tenía la autoridad de un hombre de Dios: exigente consigo mismo, pero bondadoso y sencillo con los demás.
Sabía hablar con los pequeños y con los grandes, ofreciendo siempre a todos el amor de Dios.
A nosotras, sus hijas, nos confió estar atentas a los signos de los tiempos y permanecer siempre en Dios, para hacer visible su presencia en el mundo, construyendo oasis de bondad como Betania, donde Jesús se encontraba con Marta, María y Lázaro en el calor de un hogar. Allí, en la amistad, se sentía el verdadero amor de Dios.
De esta manera podemos seguir haciendo florecer el bien en el mundo, poniendo siempre a Dios en el primer lugar, porque como nos recuerda nuestro Padre Fundador, el Beato Tomás Reggio: ‘Dios, solo Dios me basta’.
Quienes vivimos el carisma de Betania tengamos un bendecido día y mantengámonos en comunión de oración, pidiendo por la pronta canonización de nuestro Padre Fundador. ¡Feliz fiesta y bendecido día!”.
Este aniversario es una oportunidad para renovar nuestro compromiso de vivir la fe, la acogida y el servicio, siguiendo el legado de quien nos enseñó a confiar plenamente en Dios y a anunciarlo con la vida.