Este 3 de mayo se celebraron 114 años desde la creación del Obispado Castrense de Chile, por medio del M.P. “In hac Beatissima Petri Cathedra”, del Papa San Pío X, el año 1910.
Con la presencia de los representantes de los Comandantes en Jefes de las Fuerzas Armadas y el General Director de Carabineros, se celebró este lunes 06 de mayo los 114 años de vida del Obispado Castrense de Chile, sirviendo a las Fuerzas Armadas y Carabineros de Chile.
La Eucaristía fue presidida por el Obispo Castrense de Chile, Mons. Pedro Ossandón Buljevic, y concelebrada por los capellanes de la guarnición de Santiago y Valparaíso, en la cual se dio gracias a Dios por todo el trabajo realizado durante su historia. Además, oportunidad para renovar y fortalecer la vida cristiana de los uniformados y sus familias para que sean verdaderos discípulos misioneros en sinodalidad.
El Obispo agradeció a los Capellanes castrenses su labor pastoral y los animó a continuar trabajando, con mayor fervor al servicio espiritual a los integrantes de las Fuerzas Armadas y Carabineros.
Mensaje del Obispo
Al celebrarse el próximo 03 de mayo el centésimo décimo cuarto aniversario del Obispado Castrense de Chile, quisiera hacer llegar un cordial saludo a los capellanes, diáconos, catequistas, fieles católicos y personas de buena voluntad.
Hoy es una ocasión propicia para recordar que el Ordinariato Militar se gestó junto a los primeros pasos de la República. El primer nombramiento de un sacerdote como Capellán castrense se remonta al año 1811 y recayó en la persona del presbítero Manuel Videla. Así, desde sus inicios, nuestros hombres y mujeres de armas han sido acompañados y fortalecidos con la presencia de capellanes, quienes formando parte de sus filas, han sabido mostrar con la palabra y el ejemplo la presencia de Dios.
Esta historia de acompañamiento espiritual toma forma jurídica el año 1910 cuando la Santa Sede crea la “Vicaría Castrense”, a petición expresa del Gobierno de Chile. En esa instancia se fundaron los Servicios Religiosos para el Ejército y Armada, a los que posteriormente se sumaron los Servicios Religiosos para Carabineros, el año 1934 y para la Fuerza Aérea en 1936.
Hoy el Obispado Castrense de Chile, a través del Servicio Religioso del Ejército, continúa realizando la misión de brindar la atención religiosa, espiritual y sacramental a todo el personal que lo requiera; promover la formación moral en las grandes virtudes militares y la de asesorar al mando en materias religiosas y éticas, cuando éste lo solicite. A esto, se suman las prioridades pastorales de contribuir a la formación integral de la persona, al fortalecimiento de la familia, a la educación en la fe de los jóvenes, al acompañamiento de enfermos y ancianos, como la de fomentar la solidaridad con los más necesitados.
En este día especial de gracia, vaya mi fraternal saludo a todos los integrantes del Ejército de Chile, sus familias, capellanes y agentes evangelizadores, por su vocación, sacrificio y testimonio en bien de los demás.
Que a todos el Señor nos regale una fe comprometida que persevere en medio de las adversidades, una esperanza firme, que no decaiga ante las dificultades y una caridad sincera frente a los más necesitados.
Que María Santísima, a quien veneramos y amamos bajo la advocación de Nuestra Señora del Carmen, Madre y Reina de Chile, Patrona y Generala jurada de nuestro Ejército, nos cobije y proteja siempre de todo mal.
+ Pedro Ossandón Buljevic
General de Brigada
Obispo Castrense de Chile
Fuente: Comunicaciones Obispado Castrense
Santiago, 07-05-2024