Este III Domingo de Pascua, antes de rezar el Regina Caeli, el Pontífice ha reflexionado sobre la importancia de compartir los momentos fuertes de nuestra vida de fe y no únicamente mensajes que han tocado, en lo bueno o en lo malo, nuestra vida.
“Hay algo de lo que a menudo nos cuesta hablar, de lo más hermoso que tenemos que contar: nuestro encuentro con Jesús”. Este mediodía el Papa Francisco ha reflexionado sobre la importancia de compartir la fe y los encuentros con Jesús, al igual que hicieron los dos discípulos aquella noche de Pascua cuando volvieron al cenáculo y expresaron a los apóstoles la alegría de su experiencia.
El Papa explica antes los miles de fieles presentes en la Plaza de San Pedro que cada día nos bombardean con mil mensajes: “Muchos son superficiales e inútiles, otros revelan una curiosidad indiscreta o, peor aún, nacen de cotilleos y malicia. Son noticias que no sirven para nada, es más, hacen daño”. Pero también hay noticias hermosas, positivas y constructivas – explica el Papa, recordando que: “es hermoso también compartir las realidades que, en lo bueno y en lo malo, han tocado nuestra vida, de modo que podamos ayudar a los demás”.
La importancia de hablar de nuestros momentos decisivos de fe
Pero lo más importante es compartir nuestro encuentro con Jesús: “Es importante compartir esto en familia, en la comunidad, con los amigos. De igual modo que sienta bien hablar de las inspiraciones buenas que nos han orientado en la vida, de los pensamientos y de los sentimientos buenos que nos ayudan a ir hacia delante, también de los esfuerzos y de las fatigas que hacemos para entender y para progresar en la vida, tal vez también para arrepentirnos y volver sobre nuestros pasos”. Si lo hacemos – puntualiza el Papa – “Jesús, precisamente como sucedió a los discípulos la noche de Pascua, nos sorprenderá”.
Todos hemos tenido un encuentro con el Señor
Por último, el Santo Padre pide que en silencio pensemos en un momento fuerte de nuestra vida, un encuentro decisivo con Jesús: “Todos lo hemos tenido, todos hemos tenido un encuentro con el Señor. Hagamos un poco de silencio y pensemos: ¿cuándo encontré al Señor? ¿Cuándo el Señor se hizo cercano a mí? Pensemos en silencio” ha pedido el Papa a los fieles este mediodía. Una vez que hemos pensado en este momento, es el turno de otras dos preguntas con las que el Papa nos hace reflexionar: “Y este encuentro con el Señor, ¿lo he compartido para dar gloria al Señor? Y también, ¿he escuchado a los demás cuando nos cuentan este encuentro con Jesús?”.
Fuente: VaticanNews
Ciudad del Vaticano, 14-04-2024